Hay algún problema por colgar fotos de mis hijos en las redes?

Antes de que los niños cumplan cinco años sus padres habrán colgado en Internet unas 1.500 fotos suyas, ¿cuáles son los peligros que esto conlleva?

 


Un reciente estudio revela que las familias cuelgan alrededor de 300 fotos de sus hijos en Internet cada año, o lo que viene a ser lo mismo, unas 1500 antes de que los pequeños hayan cumplido cinco años de edad. ¿Cuáles son los riesgos de subir fotos de los hijos en Internet? ¿Conocen los padres dónde queda la privacidad de sus hijos?


Subir fotos de los niños a Internet


Antes de que tu pequeño haya cumplido los cinco años de edad, tú habrás subido a Internet unas 1500 fotos suyas sumadas a otras tantas que subirán el resto de la familia. Estos son los alarmantes datos que da conocer Nominet mediante su estudio realizado con encuestas a nada menos que a 2.000 familias.


La fiesta de cumpleaños, un viaje, una tarde en el parque… Cualquier excusa es buena para subir fotos de los niños a Facebook, Instagram y Twitter. ¿Sabes cuáles son los riesgos de subir fotos de los niños en Internet? ¿Conoces dónde queda su privacidad? ¿Sabes que cualquiera puede hacer uso de las fotos que tú cuelgas en la red? ¿Sabes cuáles son los riesgos de exponer a los niños a la tecnología?


Dicha encuesta pregunta a los padres y madres acerca del conocimiento de la privacidad de las redes sociales, el resultado el que te estás imaginando: tan sólo un 10% afirma estar “seguro” de su uso. El 80% tiene unos conocimientos erróneos sobre el manejo de las redes sociales.
Peligros de subir fotos de los niños a Internet
¿Dónde está el límite? Nos preguntamos entonces si se deben subir fotos en Internet o bien no compartir ninguna nunca. Una vez más, el termino medio es el más indicado.
Piensa que son varias las páginas de pornografía infantil que cogen fotos de Facebook y otras redes sociales, por lo que lo primero de todo, es proteger la intimidad de los menores. No subas fotos que no enseñarías de manera normal y limita el acceso para que no todos puedan verlas.
Si decides compartir algunas facetas de tu vida y la de tus hijos en las redes sociales, los expertos aconsejan ser prudentes; el rastro digital perdura siempre. No es lo mismo decir en un tuit que tu hijo está algo constipado esta mañana que poner una foto suya en la cama…


¿Te has parado a pensar si a tus hijos les gustaría que el resto del mundo viera esa función que hicieron en el colegio?


Por qué no subir fotos a Internet


Aquí hacemos uso de las reglas de oro: antes de colgar cualquier foto de tus hijos en Internet, ya sean niños o adolescentes, piensa en estos tres puntos:
 Primero, “No cuelgues ninguna foto que no colgarías al cabo de unas horas“.
Segundo, “No cuelgues ninguna que no colgarías en el tablón de anuncios del colegio“.
Tercero, “No publiques ninguna que pueda ser utilizada por alguien con malas intenciones“.


Recuerda que puedes restringir el acceso de las publicaciones mediante las opciones de privacidad y seguridad; que debes entender cómo se manejan las redes sociales para no cometer errores; que no debes compartir fotos de tus hijos con gente que no sea de confianza y que los recuerdos más bonitos son para compartirlos con los tuyos, no con el resto del mundo.


Motivos por los que no debes colgar fotos de tus hijos por las redes sociales


Colgar en internet imágenes de la prole no es ilegal, pero puede tener graves consecuencias


Desde la ecografía del tercer trimestre, hasta el primer baño en la playa. Muchos padres no dudan hoy en colgar fotos de la vida diaria de sus hijos en las redes sociales. Pero... ¿sabemos dónde está la línea roja a la hora de compartir nuestro álbum familiar? Es verdad que no es ilegal enviar imágenes de menores a través de las redes sociales siempre y cuando, recalca «no se dañen la intimidad, la dignidad y el honor del menor». Es decir, que en principio no debería tener consecuencias negativas.


El problema radica, en que la sociedad se ha creado una necesidad urgente de exponer todo lo que hace y las situaciones familiares que se comparten son íntimas y no deberían exponerse «En internet todo se banaliza y las imágenes se generan para todos y para siempre.


Esa actitud un tanto exhibicionista es lo se llama «narcisismo autista». «Tú subes doscientas fotos de tu retoño, y esperas que los demás te escriban de forma inmediata algún comentario. Y ojo como no te escriban.

Hay quien dice que el primer riesgo de los hijos en la red somos los propios padres. Es nuestra responsabilidad entrenarles e intentar que entiendan los riesgos de internet — como es el ciberacoso, etc.— a los que se pueden enfrentar cuando crezcan. ¿Cómo? ¡Predicando con el ejemplo!». «Partiendo de la base de que los padres son los responsables de la buena utilización de los datos personales de sus hijos, deben imponerles límites, pero también enseñarles a que ellos mismos sean capaces de limitar la difusión de su información personal.


Cuando los padres comparten fotos de sus hijos en internet «normalizan» esta conducta, que los niños interiorizan sin más. «Después no podemos pedirles a ellos que no envíen fotos por whatsapp a los 14 años, cuando ya son los responsables de sus datos, si eso es lo que han visto hacer en casa con toda naturalidad desde que eran pequeños». «Los padres tienen que ser muy prudentes. Deben utilizar el sentido común y ponerse en el lugar de un depredador sexual».


El número «Dunbar»


La mayor parte de los padres desconocen una práctica denominada «morphing». Se trata de individuos que copian una fotografía normal en internet, y mediante un programa de tratamiento de imágenes realizan un montaje con otra fotografía pornográfica. De esta práctica resulta una nueva fotografía en la que aparece un adulto o un niño protagonizando una imagen de alto contenido sexual. «¿Se imaginan las consecuencias que tendría que un compañero de clase descubriera esas fotos y las diera a conocer en el colegio?».


Pero, sin llegar a ser tan alarmistas, hay niños a los que simplemente no les gusta que otras personas les vean en un vídeo mientras hacían un divertido baile a sus padres en la intimidad del salón de su casa. «Hay que ponerse en el lugar del hijo y respetar que a ellos les puede producir vergüenza».

9 consejos si finalmente decides colgar imagenes de tus hijos:

En la foto no debe aparecer nunca ninguna pista sobre los lugares que frecuenta, como su escuela o un parque.

Nunca fotografiarlos junto a tu coche, y mucho menos que salga la matrícula del vehículo.

No añadas datos a la foto que puedan identificar al menor. Por ejemplo, no pongas su nombre o apellidos al nombre del archivo de la foto.

Nunca, nunca, nunca publiques información sobre los horarios del niño y las actividades que realiza habitualmente.

Cuando publiques una foto de niños no incluyas información que haga pensar que están solos. Prohibido decir “los echo mucho de menos cuando trabajo”

No publicar fotos que incluyan uniformes del colegio o camisetas identificativas de sus equipos.

Evita credenciales que permitan a un extraño localizarles.

Si haces la foto con un móvil o tableta con GPS asegúrate de que la función de localización está desactivada o que esos datos se han borrado. Si lo está se podría rastrear dónde se hizo la foto y encontrar al niño.

Comparte esta información con tus amigos y familiares y que entiendan la gravedad de publicar fotos de niños en internet. Pídeles que no publiquen fotos de tus hijos sin tu consentimiento.

Recuerda que tras publicar una foto de tu hijo en Twitter o Facebook, incluso aunque la compartas sólo con tus amigos, debes dar por hecho que desde ese instante es completamente pública. Y hagas lo que hagas es posible que jamás seas capaz de eliminar esa foto de internet. Y además de su propia seguridad, las fotos que publicamos son de menores, aún inconscientes del impacto que pueden tener en sus vidas.

Imagina que cuando te haces adulto tienes toda tu vida fotografiada y publicada en internet sin que hayas podido tomar una decisión responsable y madura sobre si te parecía bien o no. ¿A que no te gustaría? Tú debes ser el responsable. No publiques fotos que te parecería mal que fueran públicas de ser tuyas.